miércoles, 2 de abril de 2014

Desarrollo de talleres psicológicos para escolares coordinan MPT y UGEL

Evaluarán casos de violencia estudiantil gestados en ámbito familiar


Como una acción preventiva para contener la manifestación de conductas de violencia entre los escolares de instituciones educativas estatales, la Subgerencia de Derechos Humanos  de la MPT, a través de la Unidad Pro Mujer, viene coordinando con la UGEL-Trujillo la selección de tres planteles donde se desarrollarán talleres psicológicos al respecto.
La Gerencia de Desarrollo Social  de la comuna local aprobó  el plan de actividades que desarrolla Pro Mujer a fin de contribuir a frenar el incremento de la ola de violencia que alcanza a los escolares de instituciones educativas del Estado, que a su vez afecta a las familias de los escolares y a la sociedad.
El año pasado 2013 los talleres psicológicos, con 32 sesiones de dos horas cada una, sin interferir el horario normal de clases, se desarrollaron en la institución educativa estatal República de México, lo que dio buenos resultados, mereció la aprobación de los padres de familia y profesores, quienes al final quedaron muy agradecidos por lo hecho.
Con tal experiencia, este año los talleres psicológicos se realizarán en tres I.E. involucrando a no menos de 250 escolares del nivel secundario, explicó la subgerente de Derechos Humanos, María del Carmen Herrera Florián, quien tiene bajo su jefatura a la Unidad Pro Mujer, que cuenta con abogados, asistenta social y psicólogos.
Al inicio de los talleres psicológicos la Unidad Pro Mujer ejecutará una evaluación psicosocial de la institución educativa seleccionada, para determinar en qué situación se encuentran los escolares y comunidad educativa del plantel, luego en el desarrollo del taller se impartirán conocimientos y desarrollarán prácticas sobre el manejo de las emociones.

La gerente de Desarrollo Social, Tania Baca Romero, dijo que a través de los talleres se promociona la comunicación familiar, se demuestra cómo la violencia se gesta en el ambiente familiar y se dan las pautas para el control de las emociones, para evitar que puedan desbordarse en actos de violencia.