miércoles, 28 de agosto de 2013

Supervisores de la MPT alientan a socias de las OSB a salir de la pobreza

Promueven alejarse del asistencialismo mediante actividades productivas



Los supervisores de los Programas Alimentarios de la MPT, además de cumplir funciones propias de su cargo, principalmente verificar el cumplimiento de las normas vigentes en el otorgamiento a miles de beneficiarios del complemento alimentario, ahora se esmeran en ayudar a la socias de las organizaciones sociales de base (OSB) a salir de la pobreza.
Con ese propósito, la subgerente de Programas Alimentarios, María Elena Neyra Rodríguez, convocó a los supervisores de los programas Vaso de Leche y Comedores Populares, para definir y agudizar estrategias que faciliten salir del círculo de pobreza que aprisiona a las familias que forman parte de las OSB.
La funcionaria dijo “es un esfuerzo adicional que realizamos, pero tenemos que romper esquemas y no permitir que las socias se contenten con recibir algún alimento y se despreocupen por desarrollar actividades productivas, para mejorar sus condiciones de vida, conforme lo avizora el alcalde César Acuña Peralta”.
Para salir adelante, desarrollarse y alejarse de la pobreza, ellas no pueden quedarse a dormir más de las horas necesarias y seguir esperando el asistencialismo de un vaso de leche o una ración de alimentos en los comedores populares. Por eso, parte del trabajo que realizamos, es motivarlas e incentivarlas al desarrollo de actividades productivas, mencionó.
Además de las nuevas estrategias de trabajo, el equipo de supervisores de los Programas Alimentarios de la MPT sigue cumpliendo responsablemente su labor, cuidando que el vaso de leche y las raciones en los comedores populares -que se financian con dinero público-, lleguen a los más necesitados,

Neyra Rodríguez reveló por otra parte que, todos los días, en el marco de una estrategia para sacar de la pobreza a socias de las OSB, se producen diálogos motivacionales entre supervisores y socias, y que muchas de ellas han dejado de ser beneficiarias del complemento alimentario por haber mejorado sus condiciones de vida con ingresos obtenidos por su trabajo.