30 mil calaminas fueron donadas a pobres
Sin embargo, la gerente de Desarrollo Social de la Municipalidad Provincial de Trujillo, Tania Soledad Baca Romero –quien asistió a las primeras entregas de calaminas que hizo personalmente el alcalde César Acuña–, asumió la responsabilidad de cumplir con el encargo del burgomaestre y continuó entregando las 20 mil calaminas restantes.
Las calaminas se entregaron para proteger los techos precarios ante las lluvias anunciadas en nuestra región por el fenómeno del Niño. Esta labor fue muy ardua. Se llevaron lotes de calaminas para los beneficiarios en los distritos de la provincia de Trujillo y la entrega se hizo con todas las formalidades administrativas, para responder ante la Controlaría General de la República.
La Municipalidad de Trujillo hizo un esfuerzo adicional transportando las calaminas a los distritos a fin de aliviar el pago del transporte a los beneficiarios. Solo se entregó calaminas a los empadronados, por lo que las que no fueron recogidas por ausencia de los beneficiarios, fueron retornadas a Trujillo.
Debido a la alta demanda de calaminas, por parte de muchas familias en situación de pobreza y extrema pobreza, la Gerencia de Desarrollo Social decidió redistribuir las planchas que no fueron reclamadas por los titulares, después de 10 días, otorgando cinco calaminas a otras familias que también figuraban en los padrones adicionales.
Antes, la Gerencia de Desarrollo Social de la MPT y las subgerencias a su cargo participaron en el empadronamiento de las familias que residen en los asentamientos humanos de los distritos de la provincia de Trujillo, entre ellas a las que residen en el cerro Pesqueda.
Después, inspeccionaron las viviendas para asegurar que las planchas de calamina entregadas fueron colocadas sobre los techos de sus precarias viviendas, aseguró la funcionaria edil Baca Romero.
