jueves, 2 de octubre de 2008

Subvenciones por más de diez mil soles entregó alcalde Acuña

Hizo recomendaciones a jóvenes para triunfar en la vida


Cinco cheques por un importe total de 10.750 nuevos soles, fueron entregados por el alcalde de Trujillo, César Acuña Peralta, a personas naturales y representantes de instituciones, en calidad de subvenciones para financiar gastos para salud de familias muy pobres y obras de servicio a la comunidad.
La entrega de subvenciones se realizó el miércoles, al medio día, en el Salón Consistorial, en el denominado por el burgomaestre como Día de la Felicidad y la Solidaridad, “porque la gente que recibe está feliz y siente alegría por solucionar algunas necesidades, mientras que el alcalde también está feliz, porque le permiten ayudar a cambio de nada”.
Acuña Peralta explicó que las subvenciones se entregan de forma transparente y pública, para que los trujillanos sepan cómo se invierten sus contribuciones; por esa razón, el alcalde trabaja 20 horas diarias y eso le ha permitido ganarse el corazón de los trujillanos, aseguró.
Entre las subvenciones está la recibida por el párroco de la Parroquia San Juan Bautista, de Simbal, por un monto de cuatro mil soles que serán utilizados en la implementación y adquisición de alimentos para un comedor de niños, hijos de famitas muy pobres del distrito. El sacerdote agradeció la voluntad de servicio del alcalde.
La autoridad edil también entregó una subvención por cinco mil soles para financiar la implementación del Centro Educativo “Jorge Chávez”, lo que redundará en un mejor servicio para los escolares.
Asimismo, hubo donaciones de dinero para madres pobres que requerían ayuda urgente para adquirir medicinas para sus hijos enfermos.
CONSEJO A ESTUDIANTES CHOTANOS
En la cita también participaron alumnos del quinto año de secundaria en un colegio de Chota, quienes denominaron a su promoción con el nombre del alcalde trujillano: “César Acuña Peralta”.
Dirigiéndose a ellos, le dijo “Dios es muy generoso con los jóvenes, hijos de padres muy humildes”. Luego, poniéndose como ejemplo, explicó cómo un niño o un joven pobre puede llegar a ser congresista y alcalde, con la más alta votación; ser rector de una universidad y ser reconocido como el rector más joven del Perú, a los 43 años de edad.
Finalmente les dijo que todo es posible alcanzar, recomendándoles que para triunfar es necesario estudiar y trabajar, con voluntad y perseverancia, buena fe, respetando, escuchando y valorando a los mayores.