Para proteger la salud de los escolares
En cumplimiento de esa política sanitaria aprobada por el alcalde César Acuña Peralta, personal del laboratorio bromatológico municipal, tras coordinación con los directores, toma muestras de los alimentos preparados que se expenden en los kioscos y del agua almacenada en las cisternas.
Después de seis días, tanto los directores como los conductores de los kioscos, acuden a la Subgerencia de Salud de la MPT para conocer el resultado de los análisis de los alimentos y del agua que se consume en cada una de las instituciones educativas.
En algunas instituciones educativas, como en la GUE “José Faustino Sánchez Carrión”, el agua analizada de inmediato en el clorador, dio como resultado 0 de cloro, mientras que en el Politécnico, el nivel del cloro era bajo, recibiendo, en ambos casos, las recomendaciones para aplicar cloro al agua que consumen los escolares.
En estas instituciones, las autoridades educativas deben preocuparse por ofrecer a los niños y adolescentes un agua que no se encuentre contaminada. Sobre este tema, reciben las recomendaciones adecuadas del personal profesional del laboratorio de la Municipalidad de Trujillo.
