Dijo gerente de Desarrollo Social durante supervisión
El órgano de Control Interno depende directamente de la Controlaría Generalla República y ejecuta esta supervisión en cumplimiento de sus funciones, para cautelar la inversión de los dineros públicos que proceden del aporte de todos los contribuyentes, dijo Tania Baca Romero, gerente de Desarrollo Social de la MPT.
Fue durante una supervisión a los clubes de madres que tienen a su cargo la distribución del vaso de leche en la zona 10 de Aranjuez y zona 08 sector La Marqueza, lo que hizo junto a la subgerente de Programas Alimentarios, María Elena Neyra Rodríguez.
Baca Romero informó que el órgano de Control Interno de la MPT también supervisa y verifica el cumplimiento de la normatividad vigente, como lo hace la Gerencia de Desarrollo Social y la Subgerencia de Programas Alimentarios de la MPT.
La leche debe distribuirse obligatoriamente hervida, con el agregado de los nutrientes adiciones, como hojuela de cebada y harina de quinua, que según la Controlaría General de la República, destaca a la MPT por estar entre las primeras municipalidades del país que cumplen con los kilocalorías exigidos, bajo costo y otorgar durante mas días del año.
Todos las OSB deben tener a la vista la relación de los beneficiarios y su cuaderno de control para cuando reciban la leche o productos alimenticios. También debe tener el rol de las socias encargadas de la cocina. Cuando algún beneficiario no recoge su ración, se acude al banco de nuevos beneficiarios para darle la leche no recogida.
TALLERES PRODUCTIVOS
La funcionaria recordó a las madres que el alcalde César Acuña Peralta siempre las tiene presente. Por eso se han creado los talleres productivos, con enseñanza y capacitación gratuita, pero las inscritas son muy pocas, dijo, pidiendo que no se conformen solo a recibir su vaso de leche.
El alcalde tiene el mejor propósito de convertir a las OSB en centros productivos para que todas las socias tengan la oportunidad de generar mayores recursos económicos para cada una de sus familias y no solamente vivan esperando un vaso de leche o una ración de menú en un comedor popular, añadió.
